EL FARDEL

El fardel es un saco que llevan los pobres, los pastores y caminantes para guardar comida y otras cosas de uso personal.
Todos los " gatos " y " gatas " que nacimos entre 1.940 y 1.950 recordamos a los jurdanos y jurdanas que venían a Cereceda a pedir por las casas. Guardaban en un fardel los trozos de pan, de tocino crudo, el " puñao " de alubias o de garbanzos, que nuestras madres les daban. Guardaban también en el fardel alguna camisa usada, algunos calcetines de lana de oveja o algún jersey de la misma lana que se nos había quedado pequeño.
Cuando, con nueve o diez años, yo subía andando a La Bastida por el camino que salía de la Peña el Gato, a casa de las hermanas de mi abuela Águeda a buscar queso, el domingo por la tarde, mi madre me " mandaba " con un fardel.
En el fardel, envueltas en una hoja de " El buen amigo, " yo llevaba dos o tres pesetas de papel para pagar los quesos.
Mi padre y mis tíos Horacio y Avelino llevaban un fardel con la merienda - tocino frito, chorizo y pan - en los viajes que hacían con el carro a vender patatas a Sanchón, a La Sagrada y hasta Matilla de los Caños.
Los albañiles de Cereceda que iban a trabajar a La Nava, y los hombres de Cereceda que iban a " sacar raíces " a Zarzosillo llevaban la merienda en un fardel.

El fardel era un trozo de algún costal del trigo que " sangraba " al echar el trigo con la cuartilla en la era porque las costuras se habían descosido.
¡ Qué recuerdos nos trae el fardel !.

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