EXAMEN DE  " SALMANTINIDAD "

Mi amiga María, me envía un correo en el que me dice : " Mi familia es de Cereceda y quiere que le hagas ese examen. "
He colocado entre comillas esa palabra para indicar que es un vocablo inventado por mí  y que hacía gracia a los alumnos y alumnas, algunos muy mayores, a quienes les pedía que se " sometieran " a ese examen. Un examen de tan solo tres preguntas. Además un examen oral con tres posibles calificaciones : Aprobado, Notable, Título de  "  Salmantinidad ".
Todas las personas que siguen los artículos del blog PATALOSO conocen que he sido profesor, pero es posible que muchas desconozcan que mi carrera profesional la he ejercido en Vizcaya y en Alicante.
A lo largo de cuarenta cursos he impartido clases a muchos descendientes de salmantinos, que un día se vieron obligados a emigrar al PaísVasco y algunos al extranjero. Muchos de estos últimos a su regreso a España buscaron " fortuna y una vida nueva "  en tierras alicantinas atraídos por un clima más benigno que el de Salamanca.
Yo siempre " he presumido "  de ser de Cereceda, un pequeño pueblo de Salamanca. Enseguida alguien me indicaba que su familia o parte de ella procedía de algún pueblo de la provincia o de la capital. El paso siguiente era mi invitación a que me hicieran una visita. Y  ahí aparecía mi examen de  " Salmantinidad ".
- Su hija o su nieto me dicen que usted es de Salamanca.
- Así es. Sí, señor. Yo nací en la provincia de Salamanca, o mis padres son de allí - Estas eran sus palabras, con ese rasgo de educación propia de otras épocas hacia el profesor.
- Entonces, con su permiso, le hago unas preguntas.
La cara de algunos abuelos, siempre delante del nieto o de la nieta, " eran un poema ".
- Son solamente tres preguntas,  muy sencillas para un salmantino.
- La primera : cuando usted sale de casa, ¿ qué le pregunta a su marido cuando guarda las llaves ?.
- " ¿ Has candado la puerta ?.
- Ya tiene usted un Aprobado.
- Si su  marido coge el martillo para clavar un clavo, ¿ cuál es su consejo ?
- Ten cuidado no te maches en un dedo.
- Ya tiene usted Notable.
- Si su marido va a comer una manzana o un melocotón y coge un cuchillo, usted  ¿ qué le dice ?.
- La manzana se come a muerdos.
- Tiene usted el Título de " Salmantinidad.
Candar la puerta, macharte en un dedo y comer la fruta a muerdos son tres rasgos del vocabulario de muchos salmantinos y de todos los " hijos " de Cereceda.