BIEN ESTA LA PUERTA EN SU QUICIO y el hombre en su oficio

Se llama quicio a la parte del marco, en los extremos de una puerta o ventana, que generalmente es vertical y en el cual se fija por medio de pernios, bisagras u otro sistema a la hoja de la puerta.
El quicio va labrado en escuadra para que la puerta al cerrarse ajuste en el marco.

Es obligatorio que el quicio ajuste bien a la puerta para abrirla y cerrarla.
Igual sucede en el hombre que debe ajustarse al oficio que conoce.
Mal se me puede exigir que yo cure los animales si yo no soy veterinario. O que participe en una carrera ciclista si jamás me he subido en una bici.
Antes y ahora es " normal " que muchas personas se metan en oficios que desconocen y " así salen las obras que realizan."
Mi padre y los labradores de Cereceda se reían de quienes querían presumir de labradores y " en su vida han echado un surco".

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