JARDAZO
Esta palabra, rara en Cereceda, me la enseñó el cabo Juan.
Era el jefe del destacamento de la guardia civil en El Cabaco.
Cuando ese destacamento fué cerrado, pasó al cuartel de Sequeros.
Todos los años que permaneció destinado en ambos pueblos, fué mi " profesor particular " en las noches de invierno sentados a la camilla de la cocina.
La pronunció una tarde que a mi padre se le cayó desde el carro hasta el suelo un saco de patatas que habíamos sacado en el linar de las Dos Cerrás.
- Señor Cándido, menudo jardazo que se ha pegado el saco de patatas. Parecía el disparo de un cañón, le dijo a mi padre.
Para descargar el carro, cargado de sacos de patatas de cualquier linar, mi padre " arreculaba " el carro hasta la puerta del cuarto de las patatas que estaba en el corral.
La solera del cuarto era una hermosa piedra de cantería que sólo Dios sabe de dónde la había traído el abuelo de mi madre, que fué quien destinó un trozo del corral a cuarto para las patatas.
Solera es el nombre de la piedra del suelo en el hueco de una puerta.
Dintel es la piedra de la parte superior del hueco de la puerta.
Se ponía el saco de pie en la zona final de la caja del carro y allí se cogía al hombro para " volcarlo " en el montón de patatas del cuarto.
Esa tarde un saco se resbaló y cayó con un estrépito tremendo.
El cabo Juan denominó jardazo a ese golpe.
Jardazo: " golpe del cuerpo al caer pesadamente a tierra ".
Proviene de jarda, una antigua medida de longitud equivalente a 914 milímetros = 0, 914 m.
Aproximadamente esa es la altura desde la que cayó el saco.
Foto Google.com