NO ENTRA EN MISA LA CAMPANA, PERO A TODOS LLAMA.

Se dice este refrán contra los que manifiestan disposición para algo, logrando que otros lo emprendan. pero permaneciendo luego al margen.
Animan a muchos a hacer algo que ellos no se atreven a hacer o en lo que no participan.
Son esas personas que, a la hora de la verdad, escurren el bulto, se inventan un problema o recuerdan una urgencia para dejar a los demás en la estacada.
- Tened mucho cuidado porque ése siempre anima a celebrar una cena, pero no os preocupéis que él se inventará alguna buena razón para no ir.,. decía mi tía Floripe, porque la campana llama a todos a misa, pero ella no entra nunca a la iglesia.
- J..... pide dinero para comprar un cabrito y subir a comerlo a Cilleros mañana, día de San Juan. Seguro que él no puede ir porque tiene que encerrar heno, o ir a buscar un carro de bálago o se le ha puesto malo un churro. Éste es como " la campana que no entra en misa, pero a todos llama."
La sabiduría popular ha elegido una refrán con elementos " casi sagrados " - la misa, la campana, la llamada - para alertar a quienes oyen los toques para cualquier acción y advertirlos de quienes la convocan.
Recuerdo que un domingo fuí a vender alubias con mi tío Horacio a un pueblo del Campo Charro. Llegamos a la hora de la misa. En la plaza solamente había un hombre. Mi tío me dijo que era P. el sacristán.
Mi tío me recordó este refrán : Él toca las " todas " para entrar en misa pero se sale a la plaza a fumar un cigarro.

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