DONDE HAY MATA, HAY PATATA

Este era un dicho de los agricultores de Cereceda.
En " el pueblo de las patatas " - título que le asignó Isidro - era costumbre adivinar la cosecha de patatas, lo que se escondía en el surco de los canteros.
- Han tenido muchas vides y les has dado cuatro riegos, seguro que este año coges tres carros de patatas.  El carro de patatas era una medida de Cereceda.
- No te fíes.El año pasado en la Nava el Mónago les dí cuatro riegos y tenían vides altas y al sacarlas, nada.
- En este pueblo siempre se ha dicho que " donde hay mata, hay patata. "

Los huertos próximos al pueblo se sembraban más temprano y en Agosto estaban ya sacando algunas cestas de patatas " nuevas ".
Eran huertos especiales con mucho estiércol de los corrales, algo de abono de Tamames y hasta alguna noche de ovejas. Si, además, se habían regado tres o cuatro " dudas " era normal que  los cestos de patatas fueran abundantes. Además patatas gordas.
- Hoy, en cuanto te alejas un poco del casco urbano, los huertos de patatas se han convertido en huertos de " yerbajos."

  Foto  www.google.es