jueves, 10 de septiembre de 2020

 

EL TAJO DE CUATRO PATAS

Hace unos días el blog publicó un artículo con el recuerdo del tajo de tres patas que adornaba muchos trillos en las Eras y en el Teso.






Hoy traigo la foto del tajo de cuatro patas.

Estos tajos estaban en todas las casas de Cereceda, pues no se necesitaban carpinteros para hacerlos.

Estos tajos se hacían cortando por la mitad un palo de roble con el trenzador y lijarlo lo suficiente para sentarse en él. Luego se hacían cuatro agujeros en la parte curva con el barreno. Había que ampliar los agujeros con una lima, y preparar cuatro patas. Las patas se sacaban de las bardas del corral.

En todos los corrales había bardas que llegaban a los corrales en los carros cargados de hoja, " juntada " en la dehesa o en la Piñuela.

Si las patas se rompían o les entraba la carcoma, se cambiaban por otras. La madera era gratis en Cereceda.

Como he manifestado en varios artículos el roble, los bardones y las bardas eran abundantes en el monte de Cereceda, y el Ayuntamiento sorteaba quiñones para que los vecinos tuvieran " leña " para la lumbre del invierno.

Había tajos más altos y más bajos para que fueran utilizados por " gente menuda " y por personas mayores.

Todavía queda algún tajo de cuatro patas en el pueblo que se utilizan como escaleras cuando es necesario " colgar " alguna cesta en la sala. Antes estaban en la despensa para " alcanzar a colgar o a descolgar la matanza."

Foto  pinterest.com

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