EL LOBO

Una familia de " gatos " me pide que cuente cosas de los ataques de los lobos en Cereceda.
En los años de mi niñez se contaban historias de " lobadas "  que son las entradas de los lobos en las corralizas en la época del " tardío " cuando las ovejas se dedicaban a estercar los huertos y las tierras.
Yo nunca ví una lobada en la que contaban que los lobos mordían a las ovejas en el cuello para " sorber " la sangre.
Contaré cosas de los lobos en unos artículos del blog.

En todas las sociedades de cazadores y agricultores primitivos, el lobo es un hermano. Es un ser que ha sido enviado por un dios para enseñar a los hombres a cazar.
Los romanos veían los lobos como símbolo del amor y sacrificio maternos. La loba caza para alimentar a sus lobeznos, a sus hijos. Ellos relacionaban el lobo con el dios Marte, el dios de la guerra.
Recuerden que Rómulo y Remo, los fundadores de Roma, fueron cuidados y amamantados por una loba.
En las películas del Oeste, a las que yo soy aficionado, aparecen grandes jefes indios que honran a los lobos con su nombre, Lobo Rojo o Lobo Gris pues el lobo es un animal inteligente, valeroso y resistente a la hora de perseguir las presas.
Para los griegos es el representante del valor y la fuerza.
Una leyenda de los países nórdicos cuenta que Ingiald, hijo del rey Aumund,  era un joven tímido, pero se transformó  en un hombre intrépido y valeroso tras comer el corazón de un lobo.
Hitler eligió el lobo como símbolo de la astucia, la fuerza y el poder. Tenía sus " escuadrones de lobos ".
El lobo vive en grupo y todos los miembros se someten al líder de la manada.
En mi vida solamente he visto un lobo. Estaba muerto. Llegó al pueblo en un carro. Estaba junto al potro del tío Manolo. Joviano lo había cazado con un cepo en la finca de El Regajo. Yo tenía 6 - 7 años. El Ayuntamiento le dio un dinero - mi padre decía que 150 pesetas - por haberlo cazado.

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