LEVANTAR UNA ESTATUA.

Una amiga,defensora de la vida de pueblo, me ha contado esta anécdota.

" En un pueblo grande, comparado con los pueblines de la comarca, había un " hijo del pueblo " que era abogado de fama en la capital.
Todos los pleitos de la comarca eran suyos. Tenía fama de ser un gran defensor de los vecinos que debían enfrentarse con el poder político.
Que no te habían pagado la ayuda por el hijo nacido tres meses antes, se lo decías a don Nicolás y él te lo solucionaba. Que la Seguridad Social te quería cobrar demás, pues al abogado, Que tenías problemas con la guardia civil por una denuncia por llevar el perro suelto cuando ibas con el carro por la carretera, no te preocupabas porque don Nicolás te lo solucionaba.
Tantos favores le debía el pueblo, que un día el alcalde propuso levantarle una estatua en la plaza, como señal de agradecimiento.
- Todos le debemos algún favor a don Nicolás ( él lo llamaba Colás cuando estaban solos ), por eso yo propongo que le levantemos una estatua en la plaza. Destinamos mil duros, o lo que haga falta, pero tenemos que reconocerle todo lo que ha hecho y hace por los vecinos. No hay ningún vecino que no le deba un favor. Seguro que a todos le parece bien la propuesta del Ayuntamiento.
Hizo " correr la voz " entre sus amigos y sus enemigos en el bar, en la plaza, en el juego pelota, en la " cola del pan ", y hasta se lo dijo al juez de paz para conocer su opinión.
Todos estaban de acuerdo en levantar en la plaza una estatua a don Nicolás.
- Colás, le dijo una tarde al encontrárselo de paseo por la carretera, hemos acordado hacerte una estatua en la plaza. El Pleno del Ayuntamiento del Domingo lo aprobará.
Don Nicolás, sonriendo, le dijo :
- Mira, Manolo, yo os he ayudado y os seguiré ayudando, pero olvídate de la estatua.
- Si todos los vecinos quieren que te hagamos una estatua en la Plaza.
- Déjalo estar, que decía mi padre. Ahora, cuando alguien me pregunta por qué no me han levantado todavía una estatua en la plaza, yo les respondo que ya me la levantarán algún día, sin tener que darles más explicaciones. Cuando me la levantéis, tendré que estar una hora explicándole el porqué me la habéis levantado."

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