martes, 15 de mayo de 2018
EL HORNAZO CON HUEVOS
Cuando las gentes de Cereceda acuden a la fiesta de Zarzoso, algunos - este año me han informado que acudieron 17 personas - se sientan bajo una encina a merendar un hornazo.
El hornazo es un símbolo religioso.
En la noche del Sábado Santo, antiguamente, tenía lugar el bautismo oficial de los catecúmenos, vinculando el bautismo con la Resurrección de Cristo.
Los padrinos, fundamentalmente la madrina, regalan a sus ahijados el hornazo para recordarle su bautismo y quién es su madrina o padrino y la vinculación que entre ellos existe por el bautismo.
En Cereceda los padrinos pasan a ser compadres y comadres de los padres de la persona bautizada. Compadre o " como padre " y comadre o "como madre."
Con la llegada de la Pascua de Resurrección se levantaba la prohibición de comer carne, en vigor durante la cuaresma.
El hornazo era un regalo esperado por niños y niñas, pues era hogareño, cariñoso y barato porque se confeccionaba en casa con harina, huevos y productos de la matanza.
El huevo simbolizaba la vida. En el huevo está encerrado un ser que un día vuelve a la vida.
Para los cristianos era el símbolo del Sepulcro de Jesús. Un Jesús, que el Domingo de Pascua, resucitaba. Por eso se llama Domingo de Pascua de Resurrección.
Foto www.google.es
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