AYER, HOY Y MAÑANA
Ayer, decían los " gatos " viejos, ya está muy lejos. Tan lejos que casi ni me acuerdo de lo que hice.
Tengo un amigo, profesor de Lengua Castellana muchos años en centros educativos de varias ciudades y hoy felizmente jubilado, que comenzaba las clases con la frase de Fray Luís de León " Decíamos ayer . . . " para, a continuación, preguntar a alguna alumna lo que habían dicho ayer. Si la alumna había olvidado lo dicho en la clase anterior - que pudo haber sido cuatro días antes - mi amigo se reía y la animaba a olvidarlo para siempre, porque ¿ cree usted que yo lo recuerdo ?.
- Tampoco es bueno preocuparse por lo que vamos a comer mañana, les decía yo a las mamás que me preguntaban por cuál sería el menú del comedor para el día siguiente. A sus hijos solamente les interesa el menú de hoy porque mañana puede que no coman en el comedor del colegio.
Mi padre nunca se preocupaba ni por la lumbre de la cocina ni por los braseros de mañana, que colocábamos bajo las camillas de la sala grande y de la sala chica en la taberna.
- Igual mañana sale un día de sol y los jugadores de la brisca no necesitan brasero, me decía.
El dicho de mi abuela: " vivamos hoy como podamos y olvidemos ayer y no pensemos tanto en mañana ".
Foto pinterest.es
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