UN SUSPIRO

Las " gatas " eran mujeres que tendían fácilmente a suspirar.

- Abuela ¿ por qué suspiras ?, le preguntaba yo a mi abuela.

- Por ná, solía decirme.

Yo se lo comentaba a mi madre y ella me decía una respuesta cada vez.

- La abuela hoy está suspirando porque la gallina clueca le ha sacado sólo nueve pollitos y le había puesto docena y media de huevos.

Doce y media de huevos era la medida que tenía mi abuela a la hora de poner huevos en la cesta para que la " clueca " le sacara pollitos.

- La abuela hoy está suspirando porque ha venido el " capador " y la marrana grande no quiere comer.

Cualquier acontecimiento de la vida de los animales del corral, podía trastocar la vida de la señora " gata " y hacerla suspirar.

Don Antonio decía " las mujeres de este pueblo siempre están suspirando y rezando a todos los Santos y a la Virgen de la Peña ".

El suspiro es " Una aspiración fuerte y prolongada seguida de una espiración, acompañada a veces de un gemido y que suele denotar pena, ansia o deseo ".

El suspiro es " el aire que nos sobra por alguien que nos falta ".

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