jueves, 23 de abril de 2020


AL BUEY POR EL CUERNO Y AL HOMBRE POR EL VERBO  ( PALABRA ).

Es una frase propia de los pueblos de Salamanca.






El buey era un animal necesario para realizar las labores agrícolas antes de la aparición de los tractores.
En la Zerezeda del siglo XVIII las labores del campo, del trigo, el centeno y el lino, se realizaban con una pareja de bueyes.
Igualmente los trabajos relacionados con el carbón y el cisco se realizaban en carros tirados por bueyes. Las vacas las tenían los " gatos " de aquella época para la cría de terneros y terneras.
En las relaciones de los vecinos del Lugar indican los bueyes que tenían y las vacas de cría.
En el Cereceda de mi niñez nadie tenía bueyes. Todas las labores del campo y los trabajos para los que se utilizaba el carro, eran realizados por parejas de vacas.
Las gentes del Campo Charro decían que " al buey se le conoce por los cuernos." En los momentos que el buey " necesita demostrar su fuerza, hay que fijarse en sus cuernos para saberlo."
A la hora de aplicarlo al hombre, la fiabilidad venía determinada por " el valor que tuviera su palabra."
Mi padre, que realizaba muchos " tratos " con todo tipo de gentes - compradores y vendedores de muy diferentes mercaderías - se fiaba siempre de la palabra " empeñada."
- Cuando un hombre empeña su palabra y estrecha la otra mano, está poniendo la firma en un documento que vale más que todos los papeles, aunque se hagan en casa del notario, decía tras la barra del bar.
En Cereceda las gentes se prestaban dinero para comprar tierras o ganado o una casa o un corral sin hacer documento alguno. La palabra  dada tenía más valor que cualquier documento.





En las ferias de ganado los tratos se hacían con un apretón de manos. No importaba la hora de compra o de venta, ni la variación en el precio a lo largo del día. El precio fijado al estrechar la mano " era válido para cien días y un año, " le escuché decir a un tratante de Ávila en el ferial de Tamames.
Cuando restauramos la iglesia, el gerente de la empresa restauradora nos dijo " si queréis hacemos un contrato, pero las personas de pueblo dan más valor a la palabra dada."
Se fió de nuestra palabra y nosotros de la suya, aunque alguien le aconsejó hacer un " papel " por cuestiones de Hacienda.

Fotos   es.wiktionary.org

            lamejortierradecastilla.com

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