LAS MONDAS DE LAS PATATAS
En Cereceda llamábamos " mondas " a las pieles de las patatas.
Nosotros comíamos patatas a la mañana para almorzar. Patatas cocidas y torrezno de tocino. Había que meter comida fuerte para aguantar el frío y el estómago " rompía el ayuno " con un buen plato de patatas caldosas, cocidas a la lumbre, y un trozo de pan y el tocino sobre él.
Al mediodía eran los garbanzos quienes llenaban el puchero, pero había siempre un hueco para cocer dos o tres patatas de regular tamaño. Esas patatas estaban enteras. Solamente se les había quitado la piel. A mí me gustaban esas patatas, hechas trozos y mezcladas con los garbanzos y su caldo correspondiente, aunque mi abuela Fausta decía que " esas patats se echan para que cojan el mal sabor de los garbanzos ".
A la llegada de la noche - tras la visita a la plaza del coche de línea y acabado el rosario de cada día -, llegaban las patatas " esbaratás " con un cucharón de madera y " volcadas " en la fuente de barro que se colocaba en mitad de la camilla, y a la que se iban acercando a un ritmo pausado las cucharas de todos los miembros de la familia. La cena de las patatas " esbaratás " era " sagrada " en las casas de Cereceda. Era la única comida en la que se reunía la familia al completo.
Las " mondas " o pieles de las patatas no importaba que fueran gordas, que se llevara el cuchillo una parte del grosor de la patata, porque las mondas se aprovechaban para echárselas al ganado.
Picadas en trozos pequeños se las comían los garrapines; crudas y mezcladas con harina de cebada, o, cocidas, se las ponían en un plato viejo a las gallinas y a los pollitos.
Hasta la perra, que ayudaba en el cuidado de las ovejas, tenía " derecho " a comerlas, siempre que la dueña de la casa estuviera realizando otro trabajo, porque las gallinas eran el " tesoro " de la dueña y la comida " de las mis gallinas no la tocan ni la perra ni los gatos ".
En " El pueblo de las patatas " todo se aprovechaba de los tubérculos que se criaban en los linares y en los huertos del término municipal.
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