ALBARDÁN
Es una palabra que aprendí en el " diccionario " de la posada de mis padres. Allí llegaban por los años 50 ( 1.945 - 1.955 ) personajes variopintos de muy diversos lugares de España, además de portugueses.
A mí me gustaba hablar con todos ellos, pero, sobre todo, me gustaba escuchar porque " se aprende más escuchando que leyendo " decía mi tía Maxi, Maestra Nacional.
Albardán ( del árabe al - bardan ) significa persona que con sus gestos, cuentos o patrañas intenta hacer reír.
Quien me la enseñó presumía de ser payaso, cómico y mago. Su profesión era la de buhonero. Era vendedor ambulante de baratijas y cosas de poco valor. Hacía la venta en la plaza o a la puerta de las casas. Vendía chisqueros, mecha y piedras para mecheros a los hombres del bar, y botones, agujas e hilos a las mujeres.
Hace unos días en una conversación con un amigo , medio extremeño de Cáceres y medio portugués, me dijo que esa palabra la usaba su padre y las gentes de su pueblo con el significado de vago, holgazán, persona que " vive del cuento " y es capaz de engañar a todos con sus " malas o buenas " artimañas.
A mí me gusta la palabra porque sus tres vocales son " a " y los seguidores del blog conocen sobradamente mi afición por las palabras con esas características : dos, tres, cuatro vocales iguales son palabras de mi agrado : galán, aldaba, Salamanca, abracadabra ....
Foto google.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario