jueves, 17 de octubre de 2024

 ANTES FALTA LA PALABRA EN LA PLAZA, que el estiércol en la haza





Montones de estiércol en el linar 



En Cereceda era costumbre sacar el estiércol de los corrales - el corral de casa, el corral de los marranos, el corral de las ovejas o el chivitero - y llevarlo a las " afueras del pueblo, al muladar ".

Allí " esperaba " pacientemente la llegada del carro para llevarlo a los huertos, a los linares y a las tierras

Se iban haciendo - subido en el carro con la horca en la mano - pequeños montones, que más tarde había que " esparramar " con la misma herramienta, la horca de seis dientes de hierro.

Este trabajo - " esparramar, decimos los " gatos " - era un trabajo costoso porque el estiércol era muy pesado y había que tirarlo por todo el trozo entre montón y montón y que quedara bien esparcido, " por igual ".

El labrador podía presumir en la Plaza de haber estercolado bien sus fincas y esperar que la llegada de la trilla y la limpia demostrara su trabajo bien hecho con los carros de trigo o de cebada y de paja, o mostrar a los vecinos , con los carros de patatas, que su estiércol daba rendimientos económicos.


Foto  Google.es

No hay comentarios:

Publicar un comentario