PERRONILLAS PARA SAN MARCOS

En muchas casas de Cereceda se preparaban dulces para las fiestas de San Pablo o de San Marcos.

Todas las " gatas " sabían hacer dulces.

Se preparaba la masa en la artesa de " masar ", siempre en la cocina porque hacía frío. 

En la foto de hace " muchísimos años " o, como decía mi abuelo Matías de " aquellos entonces ", se ve a la madre y a la hija preparando la masa con las manos y los puños porque " no merecía la pena manchar el torno para hacer tan poca masa ", en una tarde tras la comida del mediodía.

Luego se preparaba una buena lumbre y una sartén con tres patas y el aceite de Las Jurdes y el anís comprado en la taberna porque " las rosquillas saben mejor si llevan unas gotas de anís." 

Puestas en la barreña de barro se les añadiría el azúcar y se guardarían en la cesta de mimbre. Una cesta que se colgaba en la despensa hasta la llegada de la Fiesta , y con ella llegaban los invitados.

El trabajo de una tarde para honrar a San Marcos y para honrar a todos los invitados de los pueblos vecinos : La Nava, El Cabaco, Arroyomuerto, Cilleros y La Bastida.

" Antaño " era muy difícil que hubiera invitados de pueblos más lejanos porque eran las caballerías quienes los traían, aunque ya empezaban a aparecer por el pueblo algunas bicicletas.

Bella estampa de una mesa, un mandil blanco y unos " cacharros " colgados en la pared de la cocina.

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