HISTORIAS DE IMPUESTOS : Alcabalas, Portazgos, El Fielato  ( continuación )

I . - ALCABALA.

Impuesto indirecto que gravaba las transacciones comerciales en España desde la Edad Media hasta 1.845. Hay quien sitúa su origen en la Edad Media. Frecuentemente se asocia al reinado de Alfonso XI por la necesidad de ingresos para sostener el asedio de Algeciras.

No obstante existen textos que sitúan la alcabala en los siglos XII y XIII, antes del reinado de Alfonso XI.

Es considerado el impuesto más importante del Medievo, y parte de la Edad Moderna. Fué objeto de una meticulosa regulación a partir del año 1.377 por medio de los llamados Cuadernos de Alcabalas.

La alcabala se cobraba tanto sobre los bienes muebles como sobre los bienes inmuebles, y aumentaba el precio de los productos que gravaba.

Existían tres tipos :

. Alcabala fija : gravaba las operaciones de compraventa llevadas a cabo en los mercados.

. Alcabala del viento : cuando estas transacciones eran realizadas por forasteros.

. Alcabala de alta mar : cuando se aplicaba a artículos extranjeros en los puertos secos o mojados.

Por lo general se asocia un valor que oscilaba,  aproximadamente, entre  el 5 % y el 10 % , dependiendo de la época.

El pago de este tributo recaía sobre el comprador, aunque el vendedor respondía por la recaudación, como en el caso del actual IVA.

Existían tres sistemas de recaudación de este impuesto:

Administración directa: realizada por un oficial designado por la corona o por una autoridad local en representación de ésta.

Encabezamiento :  realizada por instituciones asignadas por la realeza que llevaban a cabo la recaudación en beneficio del reino. Este derecho se otorgaba temporalmente.

Arrendamiento : La responsabilidad de la recaudación de las alcabalas era arrendada a un individuo o grupo de individuos.

Consistía en un contrato entre la hacienda y el comerciante o grupo de comerciantes, en el que se establecía una suma anual estimada de la capacidad de tributación de la localidad.