UNA BÁSCULA MODERNA
He de reconocer que mi memoria no alcanza a los años en los que la Paz, así la llamaban las " gatas ", tenía el comercio en Cereceda.
Recuerdo haber ido con la cartilla de Racionamiento a buscar lo que ella me ponía en un capacho que me había dado mi madre, pero la báscula moderna se escapa de mi memoria.
En el comercio de Alicia ya estaba la báscula aunque yo vivía fuera de Cereceda y acudí pocas veces a su tienda.
En el comercio de Josefa recuerdo que fuí en alguna ocasión a comprar azúcar cuando el comercio estaba tras la iglesia.
En la calle Larga me es más fácil traer a mi memoria los recuerdos pues mis padres vivían en la calle Larga.
Cuando Ima tuvo el comercio en la casa del cura, mi presencia en el pueblo era muy rara y quizás no " pisara " nunca la habitación del comercio.
Esta historia recrea en unas líneas un homenaje a las mujeres que tuvieron el comercio de Cereceda durante los años a los que va unida mi memoria.
Foto pinterest.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario