CUANDO YO FUÍ MOZA

La " señora " Juana tiene su categoría.

Nadie en el pueblo la llama " tía " como llaman a las demás mujeres.

La señora Juana tuvo un novio, hijo del pueblo como ella, que un buen día emigró a la Argentina y nunca más se supo de él´

- Fué el amor de mi vida. Fuimos novios tres años y una tarde de domingo decidimos que lo mejor era que emigrara a la Argentina donde tenía un primo carnal, un hijo de Manuela. No sé si naufragó el barco o se ha perdido en la selva pero nunca más tuvimos noticias suyas.

- Lo esperé cinco años. Cinco años con todos sus días y sus noches. El cartero nunca me trajo una carta suya. El primer año viví de los recuerdos,. Y el segundo. Y el tercero. Luego empecé a pensar en irme a la capital pero yo no conocía a nadie allí, y me asusté.

Una tarde llegó al pueblo en el coche de línea un médico joven. Era su primer pueblo. 

Juanita - así la llamaban en el pueblo - lo vió bajar del coche de línea con una maleta y una cartera y se enamoró " a primera vista ".

Una tarde, pocos días después, acudió a visitarlo con la disculpa de un dolor de muelas.

Don Eugenio la recibió sonriente, le recetó un " poco de amor ", porque ya conocía la historia de Juanita y su novio que se fué a la Argentina, y la invitó a pasear el domingo por la tarde.

- Aquella tarde me pidió que me casara con él. Yo le dije que sí. Y un año después nos casamos. Hemos vivido casados 56 años y hemos tenido tres hijos : dos chicos y una chica. Hace dos años " se me murió " y me quedé sola. Los chicos son médicos en Madrid y en Segovia. La chica se marchó a un convento de monjas y viene en verano a pasar un mes conmigo. Esta tarde los espero a todos porque mañana es mi cumpleaños.

Estos son los pensamientos de la señora Juana, sentada a la puerta de la su casa esta tarde de domingo.

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