POR SAN MIGUEL, primero la nuez, la castaña después.

La fiesta de San Miguel se celebra el día 29 de setiembre.

Ese día la iglesia celebra la festividad de los tres Arcángeles  Miguel, Gabriel y Rafael.

Es la época de recoger las nueces que caían solas, o de varear los nogales para que soltaran el fruto.

Para varear los nogales hacía falta una " barda " larga porque en Cereceda los nogales eran árboles hermosos.

Se encontraban en los huertos y linares próximos al río Chico o río del Periquito, aunque su nombre oficial fuera río Cerezo.

La mayoría del fruto había que recogerlo en el cauce del río. 

Un río que estaba sin agua. Su cauce estaba seco y los pequeños charcos los " sangrábamos " para que el agua no nos impidiera recoger las nueces.

Una vez recogidas las llevábamos en sacos sobre la albarda de la burra y las depositábamos en el sobrao a la espera de la Navidad, la época " gatuna " de comer nueces, a ser posible junto con higos " comprados ", pues Cereceda es un pueblo sin higueras,  en las cenas de las matanzas y de la Nochebuena.

Las castañas nos esperaban con la llegada del final de setiembre y los primeros días de Octubre, aunque en Cereceda las castañas llegaban más tardías.

Ir a recoger castañas por Valdecaseras - los linares a orillas del regato Valdecaseras - o por la Mata el Tremendo o la zona de la Piñuela era una tarea de los muchachos, que " armados " con un palo y una cesta nos dirigíamos al salir de la escuela a realizar la recogida.

El Día oficial de las Castañas era el primero de Noviembre con el magosto.

También en las noches de matanza y en las Navidades era tradición preparar los carboches en el carbochero de barro, que vendían los puchereros de Tamames.

Fotos  Google.com    Nueces y castañas.