OBLIGADO TE VEAS, para que creas

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Esta frase era muy corriente entre las mujeres de Cereceda.

Asunción Franco, Choni, fallecida recientemente  ( qepd ) me contó que su hermano Daniel era poco creyente, pero que en una ocasión " que se había quedao pal Valle Trigal una cabra que estaba pa parir, yo le dije que íbamos a rezar la oración de San Antonio, protector de los animales perdidos, pero él, que era mu descreído, me dijo que mejor que fuéramos a buscarla por el camino de la Sierra. Él se fué al corral a echarle cebá a las otras cabras, Mientras salíamos de casa con un farol, yo iba rezando la oración de San Antonio. Al llegar al Puente Cantería, le dije que no fuera tan deprisa, que la cabra estaba bien y que tenía dos chivinos. Mi hermano se rió de mí. Llegamos al Valle Trigal y, entre unas matas, estaba la cabra con dos chivinos , una chivina, que luego la dejamos pa criarla, y un chivino, que lo vendimos en Semana Santa y pesó catorce kilos, En el camino de vuelta Daniel empezó a creer en la oración de San Antonio. Si ya lo decía mi padre : Obligado te veas para que creas.

Esa frase se decía también referida a temas de la vida diaria.

Mi padre se encontró, un año que sembró la Hoja de Arriba, con abundancia de trigo para trillar porque había " roturado, " con azadón y espigocha, un trozo grande en la tierra de la Monte la Rade. Esa zona de monte sin roturar " en toda la vida " dio un carro de bálago, aunque los sacos de trigo fueron algunos menos de los que daban los haces de las otras tierras.

A la hora de trillar tuvimos que decidirnos por hacer una pareja mixta, una pareja de burra y vaca. Además la otra pareja era de vaca y novilla, con el consiguiente problema de moverse los dos trillos por una parva con mucho bálago y círculo pequeño. Mi padre renegó y renegó. Eso era algo " propio " de los hombres de Cereceda. Los " gatos " enseguida renegaban. Mi madre dijo que era mala idea meter esas dos parejas en el círculo de la parva. Yo, que era estudiante de Magisterio, le animé a mi padre a probar. Probamos y trillamos la parva en la mitad de tiempo de una parva con un solo trillo. 

El tío Miguel, que estaba en nuestro " lote ," le dijo a mi padre : Cándido, obligado te veas para que lo creas que se pueden hacer dos parejas aunque sea con una burra y una novilla.

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