miércoles, 4 de diciembre de 2024

 ARRECIDO








En Cereceda se decía " arrecío ".

Este adjetivo significa " muy frío, helado ".

La expresión " arrecío " se utilizaba para hacer referencia  a la sensación de un frío intenso o a un descenso brusco de la temperatura.

En el pueblo se utilizaba mucho la expresión " estoy medio arrecío de frío " que significaba que todavía conservaba algo de calor y por esa razón estaba vivo, pues decir arrecío podía significar estar muerto literalmente.

También se decía " estoy arrecío de frío ".

Era mi expresión favorita para que me hicieran un hueco cerca de la lumbre, cuando regresaba del rosario al anochecer o de encerrar las ovejas en la cuadra tras la búsqueda de " las que faltaban " por los corrales del pueblo.

Las señoras " gatas " aconsejaban a sus maridos que llevasen una toquilla de lana de oveja y hecha en casa, si tenían que salir a buscar a alguna oveja que se hubiera quedado a parir " pa la sierra ".

Con la toquilla podían tapar los corderines recién nacidos y " medio arrecíos de frío ".

- " Encontré la oveja junto a unas escobas con las dos corderas medio arrecías de frío " era una forma de celebrar la alegría de un doble parto lejos del corral en una noche del mes de diciembre.

A muchos " gatines " se les ha olvidado la " llorina " que cogían a la llegada de las ovejas a la Esquina, si  comprobaban que les faltaba una oveja en una tarde de aguanieve y con el cierzo soplando enfadado.

Hoy no hay " gatines " en Cereceda que esperen las sus ovejas junto al transformador de la luz y lloren si alguna se ha quedado a parir entre los matorrales de la sierra.


Foto  Google.com

martes, 3 de diciembre de 2024

 ESTA NOCHE EN LA PLAZA . . . 





" De esto entiendo yo un rato ", que decía mi padre cuando hablaban de hacer carbón o de machacar piedra para las carreteras.

Del oficio de la foto entiendo yo un rato.

Los titiriteros dormían en la posada de mis padres y yo me ofrecía voluntario para acompañarlos por las calles y para pasar la bandeja al final de la función.

La cabra se quedaba una noche en el corral en compañía de las cabras " de casa " y yo la llevaba hasta el " canalón " en el que estaban las berzas para que cenara antes de que llegara la cabriá, porque ella tenía que trabajar esa noche.

Mis amigos y yo teníamos siempre un lugar especial en el desfile por las calles y en la plaza para ver la función.

Todos los titiriteros me dejaban soplar en la trompeta y tocar el redoblante cuando terminaba la función y regresaban, unas veces contentos y otras veces tristes, con la " recaudación " de la noche.

Ellos no cobraban entrada.

Siempre hacían una rifa y yo era un " buen " vendedor de tiras de números, y muchas veces fuí " la mano inocente " que sacaba el número o los números de la suerte de la gorra de mi tío Horacio, mi padrino, que siempre llevaba gorra y me la prestaba un momento para el sorteo.

Cuando los titiriteros se marchaban, camino de otro pueblo, mi padre me preguntaba cuánto me habían pagado " por mi trabajo ", y yo le respondía " el señor Serafín me ha dao una perra gorda porque he sacao su número ".

Una perra gorda era mucho dinero para un muchacho de cinco o seis años.


Foto  pinterest.es

 CONOCIMIENTO Y SABIDURÍA






El conocimiento nos sirve para ganarnos la vida.

Por esa razón se realizan los estudios de una carrera.

Hay que adquirir unos conocimientos y conseguir un Título.

Con ese Título nos podremos ganar la vida.

Esa era la máxima que todos los padres " de pueblo " tenían en la cabeza cuando sus hijos comenzaban los estudios en la capital.

- Tú estudia una carrera y con ese Título te podrás ganar la vida, nos decían a los muchachos y a las muchachas de los pueblos cuando se planteaba el " futuro " de la familia.

Bajo esa máxima muchos abandonamos los pueblos y nos convertimos en " desertores del arado ".

La sabiduría nos ayuda a vivir.

Pero nos ayuda siempre : en el pueblo y en la ciudad, con Título  o sin él.

Yo se lo repito muchas veces a mis amigos jubilados : El Título desapareció, ahora aprende a vivir.

Esa es la sabiduría.


Foto  pinterest.es

lunes, 2 de diciembre de 2024

 ÁRBOLES Y AMORES, MIENTRAS TENGAN RAÍCES, tendrán hojas y flores







La parte importante en un árbol son las raíces.

La sabia llegará hasta las hojas y las flores por el tronco y las ramas.

Es toda una red de canalillos por donde el árbol se mantendrá vivo.

El amor, si tiene buenas raíces, tampoco desaparecerá.

Un amigo " filósofo ", desconozco si con título o sin él, defiende que en el amor son los hijos y los nietos quienes mantienen la familia unida.

- Un hijo puede servir para unir el matrimonio o para deshacerlo, me comenta. 

Yo defiendo que el hijo o los hijos, e igualmente los nietos mantienen el amor en la pareja.

- Y ¿ aquellas parejas que no tienen hijos ?, le pregunto.

- Tienen que buscar otras raíces para permanecer unidos.

Hoy día, le comento, no es como antaño. Ahora las separaciones " están a la orden del día " que decimos en Cereceda.

- Entonces es que las raíces no estaban en terreno abonado o que nadie se preocupó de regarlas o que el viento " fuerte " las dejó al aire y han muerto.

Yo opino de igual manera : " mientras tengan raíces, árboles y amores, tendrán hojas y flores ", que dice el refrán.


Foto  pinterest.es



Foto  Google.com




domingo, 1 de diciembre de 2024

 PRESTAR MIS ZAPATOS







Tengo un amigo viajero que en sus años " mozos " tenía la " manía " - según su madre - de coger la mochila y largarse sin rumbo a cualquier parte del planeta Tierra.

A la vuelta, siempre regresaba contento y con miles de historias para contar.

- No puede ser que te hayas recorrido tantos kilómetros en los ocho días que has estado de viaje, le decía algún amigo, de los que adoran el sofá.

- Me parecen muchos kilómetros los que has hecho por ese río, añadía otro.

- Tu ruta es bonita sobre el mapa, pero no creo que la hayas llevado a cabo, le reprochaba otro amigo.

- Explícanos cómo pueden tus pies resistir tantos kilómetros sin que te salgan ampollas. le exigía alguno del corro en el que contaba " sus andanzas de caballero con mochila ".

Yo, que he sido montañero en mis años mozos, le ofrecí un " flotador " y un cabo al que agarrarse para contestar.

 Enséñale tus zapatos y dile:

- Pregúntale a mis zapatos. Ellos te podrán hablar de los caminos que hemos recorrido juntos. Si tú quieres recorrerlos, yo te presto mis zapatos.


Foto  Google.com


PESCADOR DE CAÑA Y MOLINERO DE VIENTO, mala olla y peor testamento 





Yo desconocía este " dicho " en el que se mezclan el pescador y el molinero, pero de un molino de viento.

Tengo muchos amigos pescadores de caña que en verano se pasan la noche al fresco con tres o cuatro cañas " hincadas en el suelo " a la espera de que algún pez se acerque hasta ellas.

A la mañana siguiente los veo regresar a casa cuando yo salgo a hacer mi recorrido tempranero.

Nunca les pregunto cómo fué la pesca sino cómo fué la noche porque se juntan y se pasan las horas jugando a las cartas.

Yo pregunto por las ganancias o las " perdas " que decimos en el idioma " gatuno ".

Sus mujeres me dicen que tienen el congelador lleno de pescado pero es del que compran en la plaza del mercado.











El molinero de viento me ha sido complicado conseguir alguna opinión.

Un amigo manchego me ha explicado que el molinero era un aldeano que se quedaba con la explotación del molino.

- " Pagaba unos reales al dueño y él cobraba la maquila y, si el año era bueno, conseguía una ganancia que le ayudaba en su trabajo de vendimiador o de " cultivador de viñas ".

El testamento significaba que la herencia no existía porque el viento no era suyo sino de Dios y tampoco era el dueño del molino.



Fotos Google.com