LA CAMPANA NO VA A MISA, pero avisa

- Yo soy como la campana,  me dijo hace unos años un " gato " que andaba por la Plaza de charla hasta que la campana chica tocaba las " todas ".

En Cereceda el toque de las " todas " significaba que en ese momento el sacerdote abandonaba la sacristía y se dirigía hasta el altar para iniciar la misa.

- Usted es muy espabilao, y no es como las campanas porque ellas están en el campanario y el campanario es parte de la iglesia. Usted ahora se va al bar.

- Tienes razón, pero las campanas no pueden bajarse del campanario y, si pudieran se vendrían conmigo al bar. Que hoy ya han terminado su trabajo. Igual hasta el próximo domingo no tienen trabajo. Si tienen trabajo puede ser para bien, si hay alguna fiesta durante la semana, o para mal, si hay algún funeral. Porque bodas y bautizos, hace muchos años que las campanas no los anuncian en este pueblo.

Y el viejo " gato " se marchó mascullando algo entre dientes camino del bar.

Sus últimas palabras me llenaron de tristeza.

Las campanas de la mayoría de los 362 pueblos de la provincia de Salamanca solamente tienen dos toques:  o a fiesta o a difuntos.

Ya no hay " repique de campanas " porque en algunos pueblos las fiestas " de verano " han suprimido la Misa  en honor al patrón o a la patrona, y la misa por todos los " gatos " y " gatas " que habían fallecido durante todo el año, en el pueblo o lejos de él.

Foto  Google.com   Campanario de la iglesia parroquial de Cereceda.