¿ QUÉ MIRA EL TIO ROQUE ?

El tío Roque siempre ha vivido en el pueblo.

Cuando los sus cuñaos se fueron al Norte, el tío Roque dijo en la taberna que él se quedaba.

Cuando su hermano Sebastián, tres años más pequeño que él, dijo que se iba a Suiza, el tío Roque dijo en la taberna que él se quedaba.

Hoy el tío Roque, que fué alcalde del pueblo durante venticuatro años, ha abierto la puerta de arriba del corral, ha mirado hacia arriba y hacia abajo la calle que lleva al Melonar, y sin pensarlo ha abierto también la puerta de abajo.

Es que en el pueblo del tío Roque los corrales tienen dos puertas grandes y en una de ellas, la de la izquierda, tiene una puerta pequeña dividida en dos partes para que las personas y los animales puedan entrar y salir del corral.

Las puertas grandes se abren solamente cuando hay que sacar y meter el carro.

Hoy el tío Roque está esperando a Froilán, el chalán al que le vende cada año los terneros y que hoy viene con la furgoneta a buscar dos churros.

Como le parece que tarda, ha salido para mirar al cielo " por si ha sido la nieve que ha caído toda la noche ", la culpable del retraso de su amigo Froilán.

Esta mañana no le ha echado de comer a los churros y ya empiezan a bramar que es su forma de pedir el almuerzo.

Si la furgoneta tarda un rato más, les echará de comer porque los churros los ha vendido " olvidándose de la romana ".

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