EL AMIGO FIEL

En la vida es importante tener un amigo que sea espejo y sombra a la vez.

El espejo nunca miente.

La sombra nunca se aleja.

He escrito en varias ocasiones que uno de los juegos favoritos de las niñas de la Escuela Unitaria de Niñas de Cereceda era jugar con los niños a pisar sombras.

A mí me divertía ese juego porque, además de pisar la sombra, se decía " te he pisado la sombra y ya no crecerás " o " te he pisado la sombra y ya no encontrarás novio " y otras que se inventaba quien pisaba tu sombra.

Espejo y sombra son dos aplicaciones que se hacen al amigo fiel y que unidas representan la fidelidad.

Nada hay más fiel que la propia sombra. 

Vayas a donde vayas siempre te acompaña y es capaz de cambiar de forma y hasta de tamaño según sea la hora del día o de la noche en la que te " molestes " en mirarla.

También se jugaba a pisarte la cabeza de tu propia sombra.

Recuerdo una frase de las " gatas " casadas para mostrar  la " tontuna " de alguna moza: " Es tan tonta que se pasa las horas queriendo pisar su propia sombra ".

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