DOS ÉPOCAS DIFERENTES
Artículo escrito por Isidro Marcos Martín, GATO 2017
Los nacidos a partir del año 1930 que aún vivimos, podemos dar fe de los medios de vida que habemos conocido en las dos etapas de nuestra vida hasta el día de la fecha.
Desde el año de 1930 hasta el año de 1960, la vida de la sociedad era muy deprimida por la carencia de medios, especialmente en el campo, donde residían más de la mitad de los habitantes.
La actividad de la gente del campo se limitaba a los cultivos de la agricultura y a la ganadería.
Los cultivos de la tierra se realizaban mediante el uso del arado romano como apero fundamental, además de la azada y demás herramientas de uso manual. Estas herramientas hacían que los trabajos humanos fueran muy duros y los rendimientos económicos muy bajos.
Los abonos químicos no existían y los frutos de la tierra se basaban en la riqueza natural del suelo cultivado.
Como no había otro " camino ", las gentes aceptaban las circunstancias con total complacencia.
En las zonas más apropiadas para la explotación de la ganadería, preferentemente vacuno, cabrino, ovino y de cerda, la venta de terneros, cabritos, corderos junto a la carne, la leche, el queso o la lana eran productos que aportaban más riqueza que la agricultura.
Lo más importante para las familias del campo se basaba en la explotación de la especie del ganado de cerda, que eran la base de la alimentación en el medio rural : las llamadas matanzas familiares, cuyos productos derivados con una calidad exquisita, guardados en las llamadas despensas, situadas en lo más recóndito de las viviendas, con temperatura ambiente , en las que la conservación de los productos era natural.
De esta forma su consumo estaba apto en cualquier momento, con un paladar que, los que vivimos en aquellos tiempos, recordamos admiración.
Para las madres, como encargadas de la cocina, era su pequeño supermercado, donde en cualquier momento disponían de lo necesario para abastecer la mesa.
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