jueves, 28 de enero de 2021

 EL CURA Y EL QUE CURA NO TIENEN LA HORA SEGURA

Se refiere al cura y al médico de pueblo.

Recuerden " gatos " y " gatas " que Cereceda tenía cura, médico, veterinario, maestro, maestra y secretario que vivían en el pueblo.

Esta frase hoy carece de valor porque un amigo, cura en las Hurdes, atiende a cinco parroquias y a dos alquerías, o el párroco de Cereceda que " tiene cinco pueblos ", en idioma " gatuno."

En la gran mayoría de los pueblos " ya no hay médico. El médico vive en la capital y viene un día a la semana a pasar la consulta " es la queja de miles de habitantes de los pueblos salmantinos.

En mi niñez Don Antonio y Don Juan podían ser llamados " a cualquier hora del día y de la noche para atender a un enfermo."





El sacerdote era llamado al atardecer y tengo en mis recuerdos de monaguillo el recorrer las calles desde la iglesia acompañando a don Antonio con un farol para llevar el Viático a algún vecino porque el médico había dicho que era mejor administrárselo esa noche que esperar al amanecer.

También me contó don Juan alguna anécdota de cuando lo llamaban para atender a algún enfermo de Cilleros y lo subían en el caballo quien había venido a avisarlo al oscurecer, cuando llegaban las cabras, y " entonces no había coches sino piernas y caballos ", me decía.

Son recuerdos de " un ayer " cada vez más lejano.

Foto  google.com



No hay comentarios:

Publicar un comentario