miércoles, 30 de noviembre de 2022

 " AQUÍ ME FALTA LA LUMBRE "






Un buen amigo me contaba hace unos días que este año su padre " se ha venido a pasar el invierno en Alicante ".

En esta tierra - " la millor terreta del mon " - a orillas del Mediterráneo nos reímos del invierno porque nunca bajan los termómetros por debajo de los 10 grados, en la orilla del mar.

Yo le he comentado que su padre estará contento pues todas las mañanas sale a darse un paseo y a charlar con otros " viejos ", sentados en un banco y contándose sus " batallitas " y . . . 

Mi amigo interrumpe mis palabras para decirme que " a la tarde mi padre se pone triste y se vuelve silencioso. A él le aburra la televisión, se adormila en el sofá del salón y, en cada despertar, mira el reloj para ver cuánto falta para cenar y acostarse. La tarde para él es muy larga ".

Y añade " en el pueblo se iba al bar a tomar un café, a jugar la partida o a charlar con los jugadores sin preocuparse del reloj. Cuando le parecía bien se iba para su casa, atizaba la lumbre, cenaba y se iba a la cama ".

La vida en la ciudad ha cambiado sus costumbres y sus horarios.

Hoy he conocido " al hombre de pueblo trasplantado temporalmente a la ciudad ".

- Mire usted, me ha dicho con la mirada perdida a lo lejos , en el pueblo yo tengo la lumbre. Me acuerdo del mi abuelo que vivió unos años en nuestra casa y por la noche nos contaba cuentos y historias y mentiras de su vida que a nosotros, los sus nietos, nos parecían verdades. Todo eso sentados " alredor " de la lumbre. Yo, aquí casi no veo a los mis nietos porque cada uno se va a su habitación a estudiar en cuanto cenamos.

" Aquí, me falta la lumbre ", me dice tras un larguísimo silencio.


Foto  Google.com



No hay comentarios:

Publicar un comentario