LOS SALMOS DE SAN PABLO

El día 14 de Enero - víspera de la fiesta - se hacía una gran hoguera en la plaza con las ramas de los robles que los mozos cortaban en la dehesa del pueblo. Los robles y el cisco, que se hacía tras arder la hoguera servían a los mozos para " sacar un dinero " con el que pagar la música.

Alrededor de la hoguera y por las calles del pueblo los mozos y las mozas cantaban los salmos del Santo, acompañados de la gaita y el tamboril. El tamborilero marcaba el ritmo de la música y del baile.

Según mis informadores el último tamborilero que recorrió las calles del pueblo acompañando a mozos y mozas fué Melchor, el marido de Rosa, fallecido hace unos años.

Aqui quedan para el recuerdo algunos Salmos de San Pablo - unos en versión original de la señora Encarna y otros " arreglados" por mí - .Todos tenían el mismo comienzo

   

    A San Pablo el ermitaño

    que en la cueva residía,

    un cuervo le traía el pan

    que de alimento le servía.

    A San Pablo el ermitaño

    que en la cueva residía

    la palmera le regala

    dos dátiles cada día.

    A San Pablo el ermitaño

    que en la cueva residía

    dos leones africanos

    día y noche protegían.

    A San Pablo el ermitaño

    que en la cueva residía

    los mozos cantando salmos

    festejan con alegría.

    A San Pablo el ermitaño

    que en la cueva residía

    las mozas le cantan salmos

    con hermosa melodía.

    A San Pablo el ermitaño

    que en la cueva residía

    pedimos su protección

    y honramos en este día.

Estos salmos también se cantaban durante la procesión,presidida por los mayordomos. Hace algunos años las fiestas importantes tenían siempre mayordomos o mayordomas.