DOS ÉPOCAS DIFERENTES  ( continuación )   

El nivel de religiosidad de la sociedad de la época, era bastante alto y el nivel de la humildad guardaba mucha relación con la religiosidad, con lo cual las personas en el medio rural  eran bastante solidarias.

No hay que dudar que el nivel de pobreza hace a las personas humildes. 

Está demostrado que la abundancia de medios económicos genera soberbia y arrogancia en las personas y con ello tienden a hacerse autosuficientes e insolidarias.

Remitiéndonos a los habitantes del medio rural el nivel de conformidad era bastante normal pues el trabajo del campo en contacto con todas las especies de ganado hacía la vida relajante y el trabajo en el campo en medio de la naturaleza, endulzaba los sacrificios del esfuerzo humano.

Todo dentro de la única alternativa que existía para sobrevivir pues como no se vislumbraban otras alternativas, la resignación era la base de la conformidad y, por tanto, de la felicidad.

En la época citada las familias, en general, solían ser numerosas y los niños disfrutaban de una gran libertad.

Las clases en las escuelas eran de mañana y de tarde: por la tarde las clases terminaban a las cinco ( que eran las diecisiete horas del día ). 

Los niños merendaban de prisa, y sin cita previa, se juntaban para disfrutar de la libertad, recorriendo las calles del pueblo  y haciendo sus juegos y sus travesuras, las propias de su edad.

Nunca tuvieron deberes de clase, y, a pesar de que los maestros tenían un número de alumnos de medio centenar, terminaban la escuela básica con un buen nivel cultural.