LA CACHIPORRA Y EL NOVIAZGO
Nadie en el pueblo me ha contado que ambas cosas estuvieran ligadas en Cereceda.
En todas las puertas de las casas había un trozo fijo y otro trozo - más grande - que se podía abrir.
Ese trozo que se abría estaba dividido en dos partes iguales : la puerta de abajo y la puerta de arriba.
La puerta de arriba abierta significaba, en palabras de mi padre , " que los moradores de la casa estaban vivos ".
Mi padre decía : " Abre la puerta de arriba del corral porque si no se pensarán que esta noche nos hemos muerto todos "
Y yo acudía a abrir la puerta de arriba. Esa puerta se cerraba con una llave, se " candaba " que decimos en Cereceda.
La puerta de abajo tenía una tranca y se podía abrir y cerrar desde dentro y desde fuera.
En la puerta de abajo estaba la gatera, el agujero redondo por el que entraba y salia el gato " como gato por su casa ".
La cachiporra era un arma contundente que consistía en un palo de madera fuerte o endurecida al fuego ( se le metía en el horno al sacar el pan ). En uno de sus extremos remataba con una especie de bola que en algún tiempo se guarneció con puntas de hierro.
" En algunos pueblos de la Ribera del Duero, el mozo se declaraba metiendo la cachiporra por la gatera de la puerta de la casa de la novia. Si desde dentro la tiraban a la calle, significaba que era rechazado. Si la dejaban dentro es que le aceptaban como novio y esperaban que fuera a recogerla y a hablar con los padres de la moza ".
Revista de folklore nº 500 pág 6
Foto Google.com
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