ADIÓS PADRINOS Y MADRINAS

Un amigo sacerdote, gran entendido en las leyes de la Iglesia, a las que él denomina cánones, me ha llamado para " darte una mala noticia: Un arzobispo italiano ha eliminado los padrinos de bautismo y de confirmación ".

Antes de esta noticia yo desconocía al señor Arzobispo de Palermo ( Italia ) pero ahora lo apunto en mi lista de personas " non gratas ".

El arzobispo afirma que " desde hace algún tiempo se viene discutiendo sobre la suspensión o abolición de la institución del " padrinamiento ", considerada, de hecho, no obligatoria por el propio Código de Derecho Canónico, que al respecto se refiere a una apreciación discrecional significada por la cláusula " en la medida de lo posible ". cf. Cánones 872 y 892.

Me desagrada la opinión de este señor Arzobispo porque " echa por tierra " la teoría de las " gatas " de Cereceda de que " quien tiene padrinos se bautiza ", porque ahora se puede bautizar a cualquier criatura sin padrino y sin madrina.

En Cereceda había la " costumbre " de que los padrinos de la primera criatura de un matrimonio fueran de parte del marido, y para la segunda criatura de la parte de la mujer, al igual que el nombre que se ponía a la criatura bautizada.

Mis padrinos fueron mi tío Horacio y mi tía Floripe, hermanos de mi padre,  y el nombre que me pusieron fué el de mi abuelo paterno, Atanasio, fallecido cuando yo nací.

Mis padrinos de bautismo lo fueron también, siguiendo la costumbre de Cereceda, de mi boda y del bautizo de mi primer hijo, siguiendo una vez más la costumbre de " gatos " y " gatas ".

Mi padrino y mi madrina fueron siempre mis tíos favoritos y yo fuí considerado por ellos su sobrino especial, no sólo con el regalo del aguinaldo el día uno de Enero de cada año, sino que mi padrino me daba una " paga " mayor cada domingo o cada día de fiesta, a la que daba a los otros sobrinos: a mí una perra gorda y a ellos una perra chica.

El señor Arzobispo y los Cánones pueden decir lo que quieran, o como se dice en Cereceda: " pueden decir misa ", que yo seguiré defendiendo a los padrinos y las madrinas  de todos los " gatines " y " gatinas " de Cereceda.

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