DEJARLE EN LA ESTACADA

Significa dejar a uno en el peligro, dejarlo abandonado a su suerte, que casi siempre, significaba una muerte segura.
La frase proviene de la época de los torneos medievales, que se celebraban en un terreno limitado con estacas de madera clavadas en el suelo.
La estacada era ese rectángulo. Quien perdía el desafío era quien quedaba en la estacada, siempre malherido y abandonado, mientras el vencedor era llevado entre vítores ante el Rey o el Caballero que presidía el torneo.
Era muy corriente que todos olvidaran al caballero perdedor, puesto que nadie quería mostrar públicamente su amistad con el vencido.
En Cereceda se decía esa frase cuando se abandonaba a alguien a quien se había hecho una promesa de ayuda.
- José me dijo que me prestaba el carro, pero ahora me ha dejado en la estacada.
- Me prometió la burra y ahora me ha dejado en la estacada.
- Tu amigo te ha dejado en la estacada. No ha aparecido a ayudarte a matar los marranos.
Estas frases y otras parecidas se decían en el pueblo cuando yo era pequeño.

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