LA VACA 3721

Aunque hace muchos años que abandoné el campo - mi huerto es muy pequeño - me sigo interesando por todas las actividades agrícolas y ganaderas.

Hoy he visto en una televisión autonómica una cuadra de vacas lecheras.

En Cereceda las llamábamos vacas suizas. Eran vacas que caminaban despacio, de colores blanco y negro, con unas tetas muy grandes a las que se ordeñaba cada día, por la mañana y por la noche.

Las vacas que teníamos la inmensa mayoría de los " gatos " eran vacas para trabajar. Cada año solían regalar a su dueño un ternero. Solamente durante unos días, tras el parto, las ordeñábamos si la cría no mamaba toda la leche que le proporcionaba la madre.

En siglos anteriores en Zerezeda había dos boyás : la de las vacas para criar terneros y la boyá del ganado que se destinaba al trabajo. Ese ganado eran bueyes. Al ganado que no se destinaba al trabajo se le denominaba ganado " holgón ".

En la cuadra de vacas que he visto en la televisión me ha llamado la atención que cada vaca lleva un número en una placa en la oreja. Es el crotal.

- Es el Documento de Identidad de cada vaca, ha dicho la propietaria. Ahora se está perdiendo la costumbre de " bautizar " con un nombre a las crías jóvenes y se comienza a denominarlas con un número. Aquí está la vaca 3721, que tiene un cuerno que se le mueve de algún golpe que recibió cuando era muy joven.

Yo me he imaginado que en la boyá de la Cereceda de antaño, la de mi niñez, el boyero llevara una libreta y fuera anotando detalles de cada vaca según un número que él le ha asignado  por razón de su nacimiento :

- La 208 la he visto esta mañana que " anda al toro ". Se lo diré a su dueño.

- La vaca 194  he visto que cojea porque debe haber pisado mal en alguna piedra de la sierra.

- La vaca 31, que es una vaca vieja y que lleva años en la boyá,  la he visto esta mañana un poco " implá ". Su dueño tendrá que avisar al tío Fael o llamar al veterinario.

- La vaca 412, que nació hace dos años y es una " buena novilla " , se quedará mañana en el corral porque " está pa parir ".

Aquellos nombres que escuchábamos todos los días en El Chapatal al anochecer - Campanera, Negrita, Jarda, Veleta, Luna  ... - cuando las vacas llegaban al pueblo en busca del corral y el pienso de la noche, han sido cambiados por números.

¡ Qué pena !.

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