HIJA DE GATA, RATONES MATA

Yuri, GATO 2020, y estudiante de español en un país del Centro de Europa, me envía un correo para preguntarme si este refrán se dice en Cereceda.

Cereceda es el pueblo de los " gatos " y de las " gatas ".

Es normal que tengamos en nuestros genes las costumbres y las enseñanzas de nuestros mayores, " gatos " y " gatas ".

Presumimos de ellas y nos sentimos muy honrados de tener esas raíces, pues la frase del escudo de Serafín, gato y sacerdote dice en su leyenda " de las raíces brota la vida ".

Los gatines desde pequeños aprenden a perseguir y atrapar a los ratones.

Mi madre decía que los gatines deben estar junto a la lumbre de la cocina en invierno, pero mi padre, poco amigo de la familia gatuna, decía que se debían criar en la despensa y en el sobrao que era donde se almacenaban la matanza y los cereales.

A mí me parecía que el mejor lugar para los gatines era el cuarto de las patatas, en el que había " huras " de los ratones hechas en las paredes, que eran de adobes, y donde podrían dormir " calentitos " porque en invierno tapábamos las patatas con " brazaos " de gelechos secos.

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