viernes, 8 de julio de 2016

EL PUEBLO DE LOS GATOS

Yo encargué a Esperanza Rodríguez González, " gata  "  de Cereceda, profesora de la Escuela de Idiomas de Burgos, que  escribiera para el blog un artículo sobre Tommy y Dora.
Me ha enviado el artículo, que próximamente publicaré, en el que se pregunta por qué a los de Cereceda nos llaman " gatos. "
Esta es mi explicación.




En repetidas ocasiones he manifestado que en Cilleros se encontraba el celler o almacén donde el Conde de Miranda guardaba los impuestos  - trigo, cebada, centeno, lino - que los pueblos de los alrededores le pagaban.
La Bastida era el bastión o fortaleza donde residían los guardianes del almacén. El almacén pertenecía a la fortaleza : De ahí el nombre Cilleros de la Bastida.
En Cilleros vivían muchos gatos bien alimentados y muy bien tratados pues  eliminaban los ratones que acudían a comer el grano del almacén.
Pero un día, cuya fecha exacta desconozco, los vecinos dejaron de pagar impuestos " en especie " al Conde y los gatos se quedaron en el paro , sin comida y sin subsidio.
La gran colonia de gatos de Cilleros tuvo que emigrar
Algunas familias se acercaron a La Bastida, pero los gatos de la fortaleza " defendieron  con uñas y dientes " su territorio.
Entonces nombraron a Tommy,  jefe de la colonia y él los condujo hacia el río Yeltes. Por un puente de palos cruzaron el río y se dirigieron a Cereceda. Los pocos gatos cerecedanos se sometieron al " ejército " llegado de Cilleros pues eran diez veces superiores en número y fortaleza.
De esta forma Cereceda se llenó de gatos y gatas.
Las cerecedanas se pasaban el día " escoba de brezo en ristre " peleando con la abundantísima colonia gatuna, que se comían las patatas del caldero, la comida de las gallinas, los huevos del nidal, ocupaban toda la lancha de la lumbre, y en invierno se pasaban las madrugadas anunciando con sus maullidos heladas y nevadas, miau, miau, ha helao,  ha helao.
La señora Juana, la panadera, ya no podía con los gatos, pues se comían los panes antes de llegar al horno.
...Y un día regaló una gata y un gato a su cuñada de El Cabaco, y otro día una pareja a su prima de La Nava, y otra a su pariente de El Casarito.
Todas las mujeres de Cereceda iniciaron la Fiesta del Regalo Gatuno, y a todos los pueblos de los alrededores llegaron gatos y gatas de Cereceda.
Cuando alguien preguntaba en Arroyomuerto o en Cepeda, en Sequeros o en La Alberca "· de dónde es ese gato tan majo " o " esa gata tan cariñosa ", la respuesta era siempre la misma " de Cereceda."
Tommy perdió parte de su ejército gatuno y con  " un grupo de fieles " decidió regresar a Cilleros, su pueblo. La nieve los obligó a refugiarse en una cueva con pinturas rupestres a mitad de camino, y así nació,  para la Geografía, La Peña El Gato.
Los gatos y las gatas de Cereceda adquirieron fama en toda la comarca, y a los habitantes de ese pueblo los bautizaron " gatos " y " gatas. "
Y hasta hoy.

Etiqueta.  Historia

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