domingo, 3 de junio de 2018


MANDAN AL GATO Y EL GATO MANDA A SU RABO.







Era una frase que mi tía Floripe repetía muchas veces. Era muy normal que en Cereceda escuchara esa frase en boca de las mujeres del pueblo.
Significa que en la vida, en la sociedad y en la familia hay unas categorías. Esas categorías de mando deben ser respetadas de acuerdo con la edad en la mayoría de los casos.
Cuando en casa te mandaban a hacer " algo " que no te gustaba, siempre buscábamos alguien " por debajo " a quien transmitir la orden  o el encargo.
Si mi tía me mandaba a llevar una cesta de patatas o una cazuela de garbanzos a una casa y yo " adivinaba " que no me darían una propina, o la dueña de aquella casa era un poco " gruñona ", inmediatamente le pasaba el " encargo " a mi hermano ".
- Vete a llevar este tazón con la " yelda " a la señora ... - me decía mi abuela Fausta.
- Dice la abuela que le lleves esta yelda a la señora ... - le decía yo a mi hermano.
Si él renegaba y la abuela lo oía, le gustaba decir esa frase :
- " Mandan al gato y el gato manda a su rabo. "
Esa frase todavía " sigue en vigor" entre las mujeres de Cereceda
- He mandado a mi nieta " a buscar el pan " y ella le ha dicho a su hermano - más pequeño - que vaya él. " Se manda al gato y el gato manda a su rabo."
Recuerdo la frase en boca de un vecino en su época de alcalde :
- Le he dicho a ...  ( concejal del Ayuntamiento ) que llame a .... y éste se lo ha mandado al alguacil. "Se manda al gato y el gato manda a su rabo."

  Foto www.google.es

Nota . - Este artículo es el número 2.000, Son 2.000 los artículos publicados en el blog, pero son algunos menos los que yo he escrito, pues el blog ha llegado a ese número con los artículos de colaboradores o los publicados en la Revista PATALOSO.

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