sábado, 8 de abril de 2023

 EL ALMIREZ







Es una palabra que procede del árabe, al-mirhas, " instrumento para machacar ".

Es un recipiente en forma de cuenco y un mazo que se coge con una sola mano y a base de golpear el fondo muele el producto contenido en él.

En Cereceda decimos " machar " en sustitución del verbo machacar.

Mi madre tenía siempre dos o tres almireces en la cocina porque en los años de mi niñez era frecuente que en la taberna se celebraran comidas o cenas en las que la carne - gallo, cabrito, conejo o tostón - eran el plato " principal " o, mejor dicho, el plato único.

A los " gatos " les gustaban los ajos " machados " en el almirez y mezclados con aceite jurdano y perejil.

Puedo presumir de haber sido en muchas ocasiones el encargado de realizar el trabajo de preparar la salsa para la fuente de " tajás " de cualquier animal que mi madre preparase.

Recuerdo las fuentes de jabalí, colocadas " al amor de la lumbre " , mientras yo preparaba en el almirez la salsa correspondiente ; una con ajo y otra sin ajo. 

Porque, como en la taberna no había platos individuales, mi madre ponía dos fuentes de carne, una  " con ajo y otra sin ajo " anunciaba ella a los comensales.

Así, cada uno, tenedor en una mano y " cacho " de pan en la otra, pinchaba en la que era de su agrado.

Hoy tengo en mi casa alicantina un almirez de cerámica que nunca se ha utilizado para guisar y está solamente como adorno.

El otro almirez de bronce descansa en la repisa de la chimenea en la casa del pueblo a la espera de una mano " amiga " que lo despierte de su sueño de años.


Foto  es.wikipedia.com   Almirez de bronce español del siglo XVIII.


No hay comentarios:

Publicar un comentario