LAS GUERRAS EN EL MUNDO  ( continuación )  

No se puede pasar por alto el despotismo de Hitler con los campos de concentración y con el exterminio de miles de judíos.

Cuando te paras a pensar en tantas atrocidades cometidas por seres humanos y haces un alto en el camino, deduces que parece increíble que haya personas con entrañas tan criminales.

La conclusión es muy clara: de todos los seres vivos de la naturaleza, el ser humano es el más villano y de peores intenciones.

En todos los seres de raza animal, sus comportamientos obedecen a una tendencia genética inmutable que arrastran desde su nacimiento, con lo cual su vida siempre ha sido y seguirá siendo totalmente inalterable.

El ser humano por su condición de haberlo dotado Dios de inteligencia - virtud tan especial - la desoye en muchas  ocasiones para hacer uso de ella únicamente para su provecho personal, incluso conociendo que su actuación perjudica a su propio prójimo.

Las defensas del ser humano cuando se ponen en práctica no tienen límites. Baste recordar el sadismo humano que le lleva al asesinato de sus semejantes, es lo más grave que se puede dar en la persona humana. Los defectos humanos se ponen en práctica y suelen ser varias y siempre muy graves las consecuencias - vanidad, prepotencia, soberbia - lo que le lleva a convertirse en un ser despreciable.