TROCHA

Camino estrecho, especialmente el que sirve de atajo.

Atajo es un camino más corto que el principal para ir de un lugar a otro.

En Cereceda todos sabíamos " atrochar " para ir a algún linar o a alguna tierra.

En mis subidas, acompañado por " gatos " y " gatas ", durante el verano a la Peña, había siempre algunas personas que proponían que " era mejor atrochar ". Yo les recomendaba seguir los caminos " trillados " porque iban personas mayores y las trochas están hechas para los jóvenes. 

Desde El Casarito hasta la Fuente de Simón Vela el grupo se dividía en gropúsculos según la edad, la costumbre de caminar y el valor de los peregrinos. Alguno o alguna iba abriendo una trocha por entre los " gelechos," las escobas y las madroñeras; otros seguían esa trocha recién abierta; pero la mayoría subíamos por caminos marcados que siempre iban más " tumbados " y era menos costoso el caminar, ladera arriba, hasta llegar a la carretera.

Atajar era un verbo que se empleaba en el pueblo.

- Para ir a La Nava " atajas " por la Monte la Rade.

- Para ir a Cilleros " atajas " por el camino de la Peña el Gato.

- Si estás en Valdecarros y tienes que ir a regar las Dos Cerras, lo mejor es que " atajes " por Pundientes y por La Isla.

Todos presumíamos de saber el mejor atajo para ir a cualquier lugar del término municipal. Algo que hoy - yo lo he intentado algún mes de Agosto - no se puede hacer. Todos los caminos y los atajos están cerrados de escoberas, de carrascas y de zarzas.

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