EL MADROÑO

Es una especie de arbusto de 4 - 7 metros de altura, con tronco rojizo con escamas grisáceas y hojas persistentes.
Las inflorescencias se presentan en panículas colgantes. El fruto, de 7 - 10 mm en baya, es globuloso y rojo en la madurez, y las semillas son pequeñas y pardas.
Es un arbusto que se extiende por toda la Península Ibérica. Nunca he visto árboles de madroños en Cereceda, pero son muy abundantes en las laderas de la Peña de Francia. Se cría en bosques mixtos de barrancos y desfiladeros fluviales  o laderas, hasta los 1.500 metros de altitud.
Se le utiliza como planta ornamental con sus bayas amarillas, anaranjadas y rojas según la época de maduración.
Es muy difícil de transplantar, por lo que recomiendo que se haga con semillas, que se recogen entre Septiembre y Diciembre.
Son muy sensibles a las heladas. Se dan mejor en las laderas orientadas al Sur.
Con sus frutos se hacen mermeladas y confituras, junto con las bebidas alcohólicas por fermentación, como " licor de madroño " alicantino.
En España llegó a obtenerse azúcar de madroño y en Portugal un excelente aguardiente de madroños.
Según la leyenda, de la sangre del gigante Gerión, vencido por Hércules nació un árbol que daba frutas sin hueso, en la época en la que salen las Pléyades ( en griego " palomas " nombre de una constelación ).
Entre los romanos era un árbol sagrado, dedicado a la ninfa Carna, la protectora del umbral de la casa. También ponían ramas de madroño sobre los féretros.
La madera del madroño era muy buena para hacer flautas, según los griegos.
                                                                                                           
                                                                                     Foto    es.wikipedia.org.

Etiqueta    Agricultura.