UN DESPISTE MATEMATICO

Hoy había quedado con un amigo matemático, profesor de matemáticas, en un determinado lugar a las 11 de la mañana. Media hora antes cambió la ubicación del encuentro. Diez minutos más tarde me citó, de nuevo, en el primer punto de encuentro.
Yo acudí a esa cita y mi amigo no apareció.
A las doce - una hora de retraso - me llamó enfadado porque, según él, " yo había faltado a la reunión".
A las 12 y cuarto nos reunimos en un nuevo lugar tras un acuerdo de urgencia.
Al llegar yo le hablé de los despistes de los matemáticos. Yo soy de Letras y, como es voz popular, los despistados son los de Ciencias.
Apareció por el lugar un amigo común, de Letras y dedicado al Periodismo. Para calmar los ánimos contó una anécdota de un matemático ilustre : Norbert Weiner.
Norbert Weiner, matemático estadounidense ( 26 de Noviembre de 1.894 - 18 de Marzo de 1.964 ) es conocido como el fundador de la Cibernética. La Cibernética, según Gregory Bateson es " el más grande mordisco ( muerdo en Cereceda ) a la fruta del árbol del Conocimiento que la Humanidad  haya dado en los últimos 2.000 años ", en frase de mi amigo matemático.

- En cierta ocasión, nos contó el amigo periodista,  su familia se mudó a un pueblo muy cercano de donde vivían antes. Su esposa, conociéndolo, decidió mandarle al MIT ( Massachusetts Institute of Tecnology , donde era profesor ) como todos los días y ella se encargó de la mudanza.
Tras repetirle cientos de veces que se mudaban tal día, ese día le dió  una hoja de papel con la nueva dirección, porque estaba absolutamente segura que olvidaría la nueva dirección.
Desgraciadamente, usó ese papel para resolver por la otra cara la duda de un estudiante.
Cuando volvió por la tarde a su casa, se olvidó que se había mudado y al verla vacía pensó que les habían robado. En ese momento recordó lo de la mudanza.
Como no conseguía recordar  a dónde se habían mudado, y no tenía el papel, y ya era de noche, salió a la calle en busca de ayuda.
Vió en la semioscuridad de la calle una chica que se acercaba, y le dijo:
- Perdone, pero es que yo vivía antes aquí, y no consigo recordar.....
- No te preocupes, papá, mamá me ha mandado a recogerte.

El amigo matemático se sonrió, pagó las consumiciones y se marchó " alabando la Cibernética ".

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