HISTORIA DE VALDECARROS  ( continuación )

Estudiado por el Ayuntamiento el problema se acuerda que, como los pocos propietarios que cultivaban las parcelas eran propietarios de ganados, accedieran a dejarlas para pasto  estableciendo una cuota al ganado, y, de la recaudación total, la mitad para el Ayuntamiento como dueño de la finca y la otra mitad distribuída para los dueños de las parcelas.
Al poco tiempo se consiguió una subvención de la Administración con la cual se compraron todos los materiales para su cerramiento, postes y alambre, siendo los trabajos de aportación vecinal cerrando toda la finca, siendo la obra de su cerramiento la que ha aportado más comodidad y beneficios al pueblo al evitar que estuvieran todos los días dos personas cuidando el ganado.
Otra ventaja que aportó la roturación de Valdecarros fué que durante el periodo de su roturación y algunos años después,  los vecinos tuvieron leña en abundancia ( raíces ), algo que era de vital necesidad para la cocina y cocer los calderos para los cerdos, animales que eran uno de los mayores ingresos de los vecinos, por las matanzas familiares y la venta de los cerdos sobrantes.

                                                                       Isidro Marcos Martín.  Gato 2.017

                         Fotos   José Manuel García Villalón

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